viernes, 8 de abril de 2011

Avanzamos

Empezamos la semana con las prisas típicas de estas situaciones y la complejidad de cerrar ciertos asuntos… Fallo de algún proveedor al confirmar materiales, presupuestos que no acaban de llegar, ajustes de última hora para adaptarnos al espacio asignado en el concurso, …
Se hace preciso rentabilizar el trabajo en equipo aprovechando las cualidades individuales de cada uno que permitan llevar a cabo con efectividad las tareas pendientes. Según pasan los días parece que por fin todas las piezas empiezan a encajar y se van atando los flecos sueltos.
Acabamos la semana cerrando tratos con los talleres que se encargarán de preparar los elementos que formarán la base del caleidoscopio y fabricar las estructuras metálicas de las jardineras móviles.
La próxima semana comenzaremos a trabajar con los materiales y con las pruebas de ensamblaje de algunos elementos fundamentales para conseguir un buen funcionamiento de nuestro proyecto.

miércoles, 6 de abril de 2011

Selección vegetal

La elección de las especies vegetales ha sido muy cuidada. Escogimos una especie con gran fuerza visual tanto en su forma como en su color y seleccionamos distintas variedades que presentan una relación cromática tanto entre ellas como con el resto de los materiales. Con la elección de estas variedades reforzamos la idea hipnótica y sugestiva que evoca un caleidoscopio.
La especie seleccionada se engloba dentro del género Osteospermum perteneciente a la familia Compositae (Astaraceae) o al grupo Daisy. Este género originario de Sudáfrica se conoce con el nombre común de African Daisy o Margarita africana y que además se adapta perfectamente a la climatología de Bilbao.
El Osteospermum ecklonis es una planta de unos 30 a 50 cm, de aspecto herbáceo y hoja perenne, con comportamiento anual. Sus hojas son verdes, alternas y principalmente de forma lancelolada. Sus flores tienen una forma similar a la de las margaritas, desarrollándose solitariamente al final de sus ramas.
Las variedades que seleccionamos tienen una particularidad que las hace idóneas para el efecto que buscábamos: los pétalos se enrollan sobre sí mismos a modo de cuchara (spooned) y le confieren al aspecto general de la flor una gran potencia visual. No podíamos olvidar que se trata de un jardín y queríamos darle a la vegetación toda la importancia que merece.  La floración se centra desde finales del invierno hasta finales de primavera, llegando raramente al verano, por lo que durante la exposición del concurso estarán en plena floración.

lunes, 4 de abril de 2011

Así empezó todo

Todo comenzó alrededor de unos cafés en el mes de octubre. Alguien propuso estudiar las bases del concurso “Bilbaojardín 2011” y pensar en la posibilidad de presentarnos como equipo.
Tras varios desayunos de trabajo la idea fue tomando forma. Partimos del agua como conexión entre los lugares de procedencia de cada uno de nosotros y el lugar de destino del proyecto, la ciudad de Bilbao. Empezamos con la lluvia y trabajamos sobre la idea de una gota de agua, su impacto sobre una superficie líquida y el movimiento de las ondas que produce. Esta idea de movimiento de las ondas nos pareció interesante y, sobre todo, el cruce de las distintas ondas, como se produce la propagación de este movimiento y el efecto hipnótico que puede llegar a provocar. Y de ahí surge la propuesta de jugar con una imagen caleidoscópica.
A medida que pasa el tiempo y vamos fijando conceptos, surgen los problemas para conseguir el resultado buscado. Como buen caleidoscopio debería ser un conjunto diverso y cambiante pero la materialización de esta idea no es tarea fácil.
Hacia finales de año se acerca el fin del plazo de entrega de la propuesta para el concurso, y aquella primera idea de una gota de agua ya ha evolucionado hasta convertirse en un conjunto simétrico de jardineras móviles, en forma de punta de flecha, que recuerdan las piezas de un caleidoscopio. En su desplazamiento, las jardineras crean diferentes dibujos a partir de los colores de la vegetación y de sus reflejos…. igual que cuando giramos un caleidoscopio.

domingo, 3 de abril de 2011

Presentación del Caleidoscopio

Caleidoscopio es una palabra de origen griego que encierra tres conceptos: belleza, imagen y observación, además de definirse como un conjunto diverso y cambiante. La intención creativa de la actuación se desarrolla alrededor de estas ideas. La intervención se organiza en varias jardineras poligonales móviles que recuerdan a las formas que crean los objetos que hay dentro de un caleidoscopio, que al reflejarse en los espejos interiores del mismo, van formando imágenes que se multiplican simétricamente. La simetría rige la colocación de las jardineras y la percepción formal del jardín, al aparecer como imágenes o espacios duplicados. Esta idea de reflexión de imágenes se ve potenciada por el uso de materiales reflectantes que aumenta aun más la sensación de duplicidad de espacios. El concepto de cambio se consigue con el movimiento de las jardineras, que convierte al jardín en un espacio dinámico. Al igual que al girar un caleidoscopio las imágenes que en él se ven cambian, en el jardín el visitante puede mover las jardineras modificando la distribución del espacio y por lo tanto alterando su apariencia. La elección de las especies vegetales ha sido cuidada, proponiendo el uso de variedades singulares adaptadas al clima de la zona con gran fuerza visual en forma y color. Se eligieron variedades de una misma especie (Osteospermum ecklonis) que presentan una relación cromática entre ellas y con lo que se refuerza la idea hipnótica y sugestiva que evoca un caleidoscopio.